Pescar en alta mar es un trabajo que mantiene a las tripulaciones alejadas de sus hogares durante buena parte del año. Los pesqueros que se adentran en alta mar se distancian de tierra y, progresivamente, también de la conectividad. Eso sí, hasta ahora porque Eurona e Hispasat se han puesto manos a la obra para no dejar incomunicados (tecnológicamente) a los pesqueros y sus tripulaciones durante los meses de faena gracias a un nuevo servicio creado especialmente para estas embarcaciones.
No es que hasta ahora estos barcos estuvieran desconectados pero disponían de una conexión básica o de ‘banda estrecha’, que solo permite el contacto vía voz y transmisión de datos a baja velocidad y alto coste. Si bien la tecnología VSAT (Very Small Aperture Terminal) permite el acceso a Internet, el envío de datos y, por supuesto, las conexiones de voz/IP. De este modo, la tripulación puede seguir en contacto con sus familiares y amigos vía Whatsapp o Skype, enviarles fotos y audios y, sobre todo, mantener el contacto. Por su parte, los pesqueros mejoran la gestión de la embarcación y de la pesca y no pierden el contacto con tierra.
Gracias a esta colaboración tecnológica, los pesqueros pueden acceder a VSAT –una tecnología que antes muchos no podían asumir- y dar un salto tecnológico para adaptar su negocio al siglo XXI, ahora que casi todos los procesos están conectados. El nuevo servicio tiene un amplio radio de cobertura –desde el Gran Sol en el Atlántico Norte, los caladeros del Mediterráneo y la costa Atlántica de África- y unas velocidades desde 500 kilobits por segundo hasta 4 Megabits por segundo, triplicando así, como mínimo, la velocidad de conexión actual.
A día de hoy, solo el 1% de los 10.000 pesqueros que hay en España disponen de VSAT, lo que abre un mercado potencial para Eurona de 9.900 embarcaciones que carecen de la última tecnología. Unos datos que se contraponen a casi el 100% de los yates, que ya navegan conectados las 24 horas del día, y que deja a los pesqueros un paso por detrás a la hora de gestionar la flota y el negocio en alta mar.
De este modo, el satélite demuestra que es la mejor opción para conectar a los barcos, por su amplio radio de cobertura, que cubre la totalidad del globo, y por tratarse de un servicio menos costoso, tanto económicamente como operativamente. Por ello, Eurona ha entrado en este sector para dar servicio tanto a pesqueros como a yates o ferrys de pasajeros.
La revolución del satélite está en marcha y ya surca los mares.
